El sueño de la razón no sólo produce monstruos

sábado, 3 de marzo de 2012

Lamed, lamer, lamo...

Lamed, lamer, lamo... nunca se lame sin intenciones.
Lamo un helado, lamo tu boca. Lamo el papel de este cigarrillo lento
y tu mirada confiesa que te provoca.
Me lame el gato. Me la metes por la boca.Te la meneas tras la cortina
con la melodía de las gotas.
La mente lamenta la melancolía de las notas. La mentira laminera
laminó su alma en costras.
Lámeme. La même...